Pensamientos cortos VI

• Si ves a mi tiempo perdido dile que lo echo de menos.
• Es inútil mirar atrás cuando la vida continúa hacia delante.
• Bajaré a tu infierno a liberarte de tus demonios.
• Se trata de unir corazones, no de partirlos.
• A estas alturas... ya no nos dejamos caer.    
• El silencio solo te habla cuando lo buscas.
• En mi piel llevo tatuadas tus caricias y tus besos grabados a fuego lento.
• El olvido es un camino que ni siquiera transita el recuerdo.
• Nunca es tarde para una primera vez.
• La vida... siempre mejor con cómplice que con testigo.
• No tengo abismos en los que caer pero sí de los que salir.
• En esta locura desatada... tendrás que atarme a la cordura.
• O me seduces o me sucedes... tú eliges.
• ¿En tu caos o en el mío?
• Que escaso resulta el abecedario cuando hay tanto que decir.
• Pasa... que no pasa nada... y de no pasar nada... termina pasando todo.
• Soñar es dejarle la puerta abierta a la realidad.
• Hay espejismos que son el fiel retrato de uno mismo.
• La idiotez de algunos es dificílmente superable. 
• Arden los recuerdos en el fuego del olvido.
• La mente es el mayor laberinto en el que perderse.
• Me armé de valor... y me desarmó con un beso.
• sentimientos encontrados que nunca estuvieron perdidos.
• Se abrazó a su fuego y se abrasó por dentro.
• En tu cuerpo encuentro mi escondite perfecto.
• La dependencia no es buena, ni siquiera la de uno mismo. 
• De vez en cuando hay que reconciliarse con el mundo, para ir cerrando heridas abiertas.
• Los mayores desastres naturales que se producen son en la naturaleza de uno mismo, predecir su alcance solo depende de nosotros.
• Pon un poco de orden en todo este desorden.     
• En una estación perdida olvidé todos mis inviernos.
• Dicen que correr es de cobardes; estarse quieto, también.
• Te quiero por encima de mis posibilidades.
• ¿Vivir con lujos es tener un lujo de vida?   
• La noche se precipita al vacío para caer en brazos del alba.
• Cuando no hay más opciones... ¿Qué opción tenemos?
• Si vuelves a empezar... que sea por el principio.
• Tan fácil como dejarse llevar; tan difícil como dejarse arrastrar. 
• Floreces en cada uno de mis inviernos.
• Existen puntos de partida que realmente son finales. 
• En pleno día hay oscuridades que ciegan.
• Limpieza: sacudir las penas para quitarle el polvo a la alegría.  
• Quiero un reloj que atrape las horas y las retenga eternamente, para que no te vayas, para que no vuelvas, para que estés siempre.